El Secretario de Estado, al margen de la presentación de un libro sobre Don Tonino Bello, se mostró «sorprendido» por las palabras de los gobiernos de Rusia y Ucrania de que desconocían la iniciativa de paz vaticana de la que habló el Papa en el vuelo de regreso de Budapest. A continuación, reiteró el llamamiento para «poner fin a esta masacre que está afectando fuertemente a Ucrania con implicaciones también para Rusia».