En la segunda parte de “Notas sobre sinodalidad”, a cargo del Director del Centro Pastoral de Redes y Acción Social del CELAM, Mauricio López, se advierte sobre el peligro que corre todo proceso Sinodal, es decir, “atar al Espíritu antes de que el discernimiento se dé”, para evitar esto “basta comprender que el proceso, el sínodo y la sinodalidad son espacios para discernir y para fortalecer el camino de la Iglesia, una Iglesia siempre reformada”.