Amar no es pretender que el otro o la vida corresponda con nuestra imaginación; significa más bien elegir en libertad tomar la responsabilidad de la vida, así como se nos ofrece. Es por esto por lo que José nos da una lección importante, elige a María “con los ojos abiertos”. El Papa Francisco en catequesis quiso dirigirse en particular a los recién casados: no terminen el día sin hacer las paces, puesto que la «guerra fría» del día después es «peligrosa». Con un gesto de amor, se hace la paz.