En la basílica de San Juan de Letrán, el cardenal vicario preside la celebración de la misa en oración por Benedicto XVI. En la fiesta de la Sagrada Familia, el apoyo y el afecto de la diócesis de Roma a la que «amó y sirvió con amor desinteresado». La encomienda a la Virgen María para que «le sostenga y consuele en su lucha».