Francisco expresó su preocupación por la situación humanitaria en Nagorno-Karabaj, donde desde el 12 de diciembre los azeríes han bloqueado el corredor de Lachin, único enlace con Armenia, aislando a miles de personas e impidiendo el suministro de alimentos y medicinas. Un pensamiento también para Ucrania: «Que la Virgen María toque el corazón de quienes pueden detener la guerra. No olvidemos el sufrimiento de ese pueblo».